La Abeja Negra Canaria desmiente mitos: Colmenas con hasta ocho cuerpos en un año 2025 excepcional.
En esta campaña apícola de 2025, nos han llegado imágenes impresionantes de apiarios en La Palma, La Gomera, Tenerife y Gran Canaria con colmenas de 6, 7 y hasta 8 cuerpos. Estos testimonios gráficos reflejan, por un lado, un buen año de lluvias y floraciones; y por otro, algo aún más importante: la extraordinaria capacidad productiva de la abeja negra canaria cuando se le dan condiciones favorables.
Accede al álbum fotográfico: 100 fotos.
Pero más allá de un buen año, lo que realmente marca la diferencia es la capacidad de adaptación de nuestra raza autóctona. La abeja negra canaria es rústica, resistente y perfectamente adaptada al clima insular, a las floraciones escasas y a los vientos, al calor y a la variabilidad del campo canario. Sabe regularse. Reduce la puesta cuando escasea el alimento, controla su población y sobrevive sin necesidad de alimentación artificial, donde otras razas se colapsarían o exigirían un manejo intensivo para no morir de hambre.
Esa inteligencia natural, afinada durante siglos en nuestro territorio, es precisamente lo que la hace única. Mientras las razas continentales están diseñadas para un calendario agrícola más largo y predecible, nuestra abeja juega con las cartas que le da el paisaje canario… y lo hace bien.
Y cuando el entorno acompaña —cuando hay flor y campo—, responde con una fuerza impresionante. Lo hemos visto este año. Colmenas rebosantes, alzas que se apilan hasta el cielo.
Se ha demostrado, una vez más, lo que tantos apicultores llevan años defendiendo:
la abeja negra canaria no solo es capaz de resistir, sino también de producir como la que más.
Cuando tiene campo y flor, le mete una tupía1 a las foráneas.
Por eso insistimos: no hacen falta reinas buckfast o italianas ni núcleos importados. Lo que hace falta es apoyar a nuestra abeja, defender su genética, y construir una apicultura adaptada, sostenible y orgullosamente canaria. Ya va siendo hora de que las políticas públicas lo entiendan y lo protejan.
Galería Fotográfica
Hemos preparado un álbum fotográfico con casi 100 imágenes tomadas por los propios apicultores desde LP, GC, TF y LG, compañeros a quienes agradecemos que nos las hayan hecho llegar. Estas fotos muestran la realidad que vive la apicultura canaria en este 2025: colmenas trabajadas por abejas negras que superan ampliamente los seis cuerpos, incluso alcanzando los ocho. Es una imagen poderosa que no necesita demasiada explicación, solo compromiso: compromiso para proteger lo nuestro, para valorar lo que tenemos, y para apostar por un modelo apícola que respete la naturaleza de las islas.
La abeja negra canaria no solo sobrevive. Produce. Resiste. Se adapta. Y ahora, también demuestra con hechos que puede competir con cualquiera.
Es el momento de dejar de mirar fuera y empezar a mirar más cerca. La rentabilidad, la resiliencia y la identidad están aquí, en nuestras propias colmenas.
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“Cuando la abeja negra canaria tiene campo y flor, le mete una tupía a las foráneas.”
Accede al álbum fotográfico: 100 fotos.
(1) Meter una tupía (ganar por tupía). Expresión coloquial canaria que significa ganar con rotundidad, sin dejar lugar a dudas. («Lo aplastó / Le ganó sin dejar dudas / Lo barrió»)