La culebra californiana suma un nuevo frente: colmenas volcadas en la Montaña de Amagro
La culebra californiana, especie exótica invasora introducida en Gran Canaria, continúa generando preocupación por sus efectos sobre el medio natural. A su impacto ya conocido sobre la fauna autóctona se suma ahora un nuevo y llamativo episodio ocurrido en el noroeste de la isla, concretamente en el entorno de la Montaña de Almagro, dentro del Monumento Natural de Amagro, un espacio protegido de más de 400 hectáreas declarado por su valor geológico, paisajístico y como refugio de endemismos únicos en el mundo.
Turismo Gáldar.
En los últimos días han aparecido varias colmenas volcadas en una explotación apícola de la zona, un hecho que ha encendido las alarmas entre los profesionales del sector.
Un problema real con efectos bien documentados
La presencia de Lampropeltis californiae en municipios como Gáldar está ampliamente documentada por las autoridades medioambientales. Su capacidad de adaptación, rápida expansión y efectos sobre reptiles endémicos y pequeños vertebrados han convertido a esta serpiente en una de las principales amenazas para la biodiversidad insular.
El Monumento Natural de Amagro, además de su importancia ecológica, alberga una geodiversidad y valores culturales que lo hacen singular dentro del paisaje noroccidental de Gran Canaria, constituyendo una pieza clave de los espacios naturales protegidos de la isla.
Colmenas volcadas y una hipótesis inquietante
Lo que nadie esperaba era que esta problemática alcanzara también al sector apícola. Según explica el apicultor afectado, varias colmenas aparecieron volcadas sin signos evidentes de vandalismo, sin huellas de ganado y sin que se hayan registrado episodios meteorológicos extremos en la zona.
Tras descartar causas habituales, la única hipótesis que ha comenzado a circular entre los vecinos es la posible intervención de la culebra californiana, cuya presencia ha sido confirmada en el entorno de la Montaña de Almagro.
“Esto no lo había visto en la vida”, reconoce el apicultor, que admite no saber cómo proteger sus colmenas frente a un peligro hasta ahora inexistente en la apicultura local.
Preocupación y falta de precedentes
El episodio ha generado inquietud en el sector, ya que no existen protocolos ni medidas específicas para evitar daños causados por reptiles invasores en explotaciones apícolas. Hasta ahora, las preocupaciones habituales se centraban en enfermedades, climatología o robos.
La posibilidad de que una serpiente pueda provocar este tipo de daños abre un escenario completamente nuevo para el que no hay referencias previas en Gran Canaria.
Apoyo del sector apícola
Ante esta situación, la nueva Junta Directiva de ApiGranca se ha puesto en contacto con el apicultor afectado para mostrarle su apoyo, estudiar posibles medidas preventivas y analizar cómo reforzar la protección de las colmenas en zonas sensibles.
Mientras se valoran soluciones técnicas y se solicita asesoramiento, la Junta Directiva ha querido tener también un gesto de ánimo con el afectado, al que ha obsequiado con una chochona, como muestra de respaldo y solidaridad del sector.