Mientras Europa avanza hacia una regulación menos estricta de determinados OMG, POLLINIS ha entregado una petición firmada por más de 420.000 ciudadanos al gabinete de la primera ministra francesa Elisabeth Borne y a representantes de la Comisión Europea. Esta petición debería alertar a los responsables franceses y europeos de la oposición de los ciudadanos a cualquier desregulación de los nuevos OMG.
Para alertar a los dirigentes franceses y europeos de la oposición ciudadana a la desregulación en curso de los nuevos organismos modificados genéticamente, POLLINIS entregó a la Primera Ministra francesa Elisabeth Borne y a dos representantes de la Comisión Europea una petición firmada por más de 420.000 ciudadanos.
La petición, apoyada por más de 50 organizaciones de 17 países europeos, pone de manifiesto la oposición masiva de los ciudadanos europeos al proyecto de desregulación que están desarrollando las autoridades europeas.
El 3 de febrero, la asociación acudió a Matignon, acompañada por la Confédération paysanne, la ONG Agir pour l’Environnement y el colectivo «Objectif Zéro OGM», para pedir a Francia que adopte una postura firme contra cualquier intento de excluir los nuevos OMG de la Directiva 2001/18/CE (del Parlamento Europeo y del Consejo, de 12 de marzo de 2001, sobre la liberación intencional en el medio ambiente de organismos modificados genéticamente) y de las obligaciones de evaluación, trazabilidad y etiquetado que establece.
Francia, primer productor agrícola de la Unión Europea, es de hecho el país más representado entre los firmantes de la petición, que reúne a más de 200.000 ciudadanos opuestos a la diseminación incontrolada de organismos resultantes de las nuevas técnicas de edición genética, cuyos impactos sobre el medio ambiente y la salud están aún muy poco estudiados.
El 7 de febrero, POLLINIS, junto con la ONG Corporate Europe Observatory, las redes europeas de Amigos de la Tierra y SlowFood, las asociaciones Demeter y Nature & Progrès, y la confederación sindical ECVC (Coordinadora Europea Vía Campesina), entregó oficialmente esta petición a representantes de la Comisión Europea.
Ese mismo día, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea, al que recurrió el Consejo de Estado francés, dictó una sentencia que dejaba la puerta abierta a un marco menos estricto para los organismos derivados de la mutagénesis aleatoria in vitro (uso de agentes mutágenos a nivel celular).
Dado que la Comisión Europea debe presentar el 7 de junio su propuesta de marco jurídico aplicable a las plantas obtenidas mediante nuevas técnicas, la voz de los ciudadanos europeos debe tenerse en cuenta en la elaboración de esta futura legislación.